Declaraciones sobre la sociedad actual y la crianza de los hijos
El pastor Molina reflexionó sobre los desafíos sociales y familiares de nuestra época, destacando temas como la depresión, el suicidio, la violencia y la delincuencia. Según él, estos problemas surgen de una alteración en el “diseño divino” y de la desesperación que enfrenta la sociedad moderna.
Crianza en entornos vulnerables: un llamado a la reflexión
Molina cuestionó cómo se están criando a los niños en contextos donde la figura de los padres está ausente. “Cuando hay hijos, estos se crían solos o son educados por el entorno del barrio. Es el barrio el que los forma porque ni papá ni mamá tienen tiempo”, señaló.
Equidad en el hogar: un mensaje de balance y cooperación
Aclarando sus declaraciones, el pastor subrayó que su intención no es desvalorizar el éxito profesional de las mujeres, sino promover una distribución justa de las responsabilidades del hogar.
Con referencia a la Biblia, afirmó: “Marido que ama a tu mujer; hace cualquier sacrificio por ella. Asimismo, la mujer que ama a su hombre está dispuesta a someterse por el bien de ambos, porque se juran amor hasta que la muerte los separe”.
En respuesta a comentarios sociales comunes, añadió: “Hemos escuchado a hombres decir que no se casan con mujeres que no producen porque ‘no va a mantener gente grande’. Esto refleja una percepción que debe transformarse”.
La importancia de una educación compartida
Molina insistió en la necesidad de que hombres y mujeres colaboren en las tareas del hogar y en la crianza de los hijos. “No es justo que yo vea a mi mujer fajada lavando y fregando, mientras yo estoy viendo televisión. Esa es una práctica muy común y debe cambiar”, declaró.
Finalmente, enfatizó que la educación y el cuidado de los hijos deben ser una prioridad compartida. Solo así se puede garantizar el bienestar familiar y el desarrollo individual de cada miembro del hogar.
Las declaraciones fueron realizadas en el programa “La Mirada”, transmitido por RTVD, bajo la conducción de Víctor Gómez Casanova y Lissette Selman.
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