Descubre Cual es la Parte Mas Sana del Pollo

    La parte más saludable del pollo según la ciencia: ni pechuga ni muslos

    El pollo es una de las carnes más consumidas en el mundo debido a su accesibilidad, versatilidad y alto valor nutricional. De acuerdo con la Sociedad Real de Ciencia Abierta, su consumo está en constante crecimiento, superando al de otras carnes. Se estima que cada año se consumen aproximadamente 50 mil millones de pollos a nivel global. Además, un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO) confirma que esta tendencia seguirá en aumento en la próxima década.

    Propiedades nutricionales del pollo

    El pollo es una fuente rica en proteínas, grasas saludables y minerales esenciales que aportan aminoácidos clave para el organismo. Sin embargo, no todas las partes del pollo ofrecen los mismos beneficios nutricionales. Tradicionalmente, la pechuga ha sido considerada la opción más saludable debido a su bajo contenido graso. La Federación Española de Nutrición (FEN) indica que 200 gramos de pechuga contienen aproximadamente 234 calorías, con solo 1 a 2 gramos de grasa por cada 100 gramos.

    La parte del pollo más saludable

    A pesar de la reputación de la pechuga, hay una parte del pollo que ha ganado popularidad entre los nutricionistas: el solomillo de pollo. Esta pieza, menos conocida, se encuentra en la parte trasera de la pechuga y ofrece un equilibrio perfecto entre sabor y valor nutricional.

    Según la dietista y nutricionista Katie Drakford, el solomillo de pollo es una opción excelente debido a su bajo contenido en grasa y su textura tierna. Por cada 100 gramos, aporta aproximadamente 110 calorías, 25 gramos de proteína y solo un gramo de grasa. Además, a diferencia de la pechuga, el solomillo no tiende a secarse, lo que lo hace ideal para recetas rápidas como ensaladas o pastas.

    Si buscas la parte más saludable del pollo, el solomillo es una excelente alternativa a la pechuga. Su bajo contenido calórico, alto aporte proteico y textura jugosa lo convierten en una opción ideal para una alimentación equilibrada. Considera incorporarlo en tu dieta y aprovecha sus beneficios nutricionales.

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